Una despensa desordenada y desorganizada puede ser una fuente de frustración y estrés. Puede ser difícil encontrar lo que necesita cuando lo necesita, y puede acabar comprando duplicados de artículos que ya tiene pero que no puede ver. Para ayudarte a mantener tu despensa organizada y funcional, hemos recopilado una lista de consejos y estrategias.
1. Evalúe su espacio
Antes de empezar a organizar tu despensa, es importante que evalúes tu espacio. Mida los estantes, cajones y armarios de su despensa para determinar sus dimensiones, y tome nota de las esquinas incómodas o estantes que pueden ser difíciles de usar. Esta información te ayudará a determinar qué tipos de soluciones de almacenamiento funcionarán mejor en tu despensa.
2. Deshágase de los artículos sobrantes y caducados
El primer paso para organizar tu despensa es deshacerte de cualquier artículo sobrante o caducado. Revisa tu despensa y retira todo lo que esté caducado o que sepas que nunca vas a utilizar. Dona los artículos no perecederos sin abrir a un banco de alimentos local, y composta cualquier alimento que ya no sea seguro para comer.
3. Agrupa los artículos similares
Una vez que hayas eliminado todos los artículos sobrantes o caducados, es hora de empezar a organizar tu despensa. Empieza por agrupar artículos similares, como conservas, pasta, arroz y productos de repostería. Esto hará que sea más fácil encontrar lo que necesitas cuando lo necesites, y te ayudará a ver de un vistazo lo que tienes y lo que necesitas comprar.
4. Utiliza recipientes apilables
Los recipientes apilables son una forma estupenda de maximizar el almacenamiento y la organización de tu despensa. Utilízalos para almacenar alimentos, ingredientes y otros artículos, liberando espacio y facilitando la visión de lo que tienes. Busca recipientes que sean herméticos, para que tus alimentos se mantengan frescos, y que sean fáciles de apilar, para que puedas aprovechar al máximo tu espacio.
5. Etiquétalo todo
Etiquetar los artículos y recipientes de tu despensa puede ayudarte a mantenerte organizado y a encontrar más fácilmente lo que necesitas. Etiqueta tus estanterías y cajones, para saber exactamente lo que hay dentro, y etiqueta tus recipientes de alimentos e ingredientes, para que puedas ver fácilmente lo que tienes y lo que necesitas comprar.
6. Utiliza cestas y papeleras
Las cestas y los cubos se pueden utilizar para guardar artículos más pequeños que, de otro modo, podrían perderse en la despensa. Utilízalas para guardar paquetes de avena, barritas y otros artículos pequeños, y etiqueta cada cesta o cubo para saber exactamente lo que contiene.
7. Utiliza el espacio vertical
Las estanterías de tu despensa pueden parecer pequeñas, pero pueden ser un recurso valioso para maximizar tu almacenamiento. Considera la posibilidad de utilizar estanterías apilables o de instalar ganchos y cestas para aprovechar el espacio vertical y sacar el máximo partido a tu almacenamiento.
Conclusión
Una despensa desordenada y desorganizada puede ser una fuente de frustración y estrés. Para ayudarle a mantener su despensa organizada y funcional, evalúe su espacio, deshágase de los artículos sobrantes y caducados, agrupe los artículos similares, utilice recipientes apilables, etiquételo todo, utilice cestas y cubos y aproveche el espacio vertical. Siguiendo estos consejos, podrá crear una despensa funcional y bonita, que le facilitará encontrar lo que necesita cuando lo necesita.